Franco Colapinto, piloto argentino de 21 años, ha dado un paso trascendental en su carrera al convertirse en piloto de reserva de Alpine en la Fórmula 1. Dicha transferencia y continuación en la Fórmula 1, llegó luego de intensas negociaciones que involucraron a su representante, María Catarineu, su socio Jamie Campbell-Walter, y Flavio Briatore, asesor ejecutivo de la escudería francesa.
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El interés de Red Bull y la apuesta de Alpine
Antes de concretar su vínculo con Alpine, Colapinto estuvo en el radar de Red Bull.
Según explicó Catarineu, Christian Horner mostró interés en el piloto argentino. “Quiso saber cuál era la situación con Williams y tener una charla con James (Vowles). Lo que pasa es que la ruta de Red Bull no pudo ser. Primero, porque tienen una academia muy potente, con pilotos a la espera, y eso no salió”, comentó la mánager.
Por su parte, Flavio Briatore fue clave para que Colapinto se uniera a Alpine. “Él fue el primer interesado. Dijo: ‘Yo lo quiero, y lo quiero así’. Jamás perdió su interés, incluso cuando las negociaciones se tornaron complicadas”, señaló Catarineu, destacando la persistencia del asesor italiano.
El nuevo contrato y las responsabilidades en Alpine
El contrato, firmado horas antes de la cena navideña, implica la cesión de Colapinto por cinco años a Alpine. Durante este periodo, el piloto tendrá un rol activo en pruebas con autos de temporadas anteriores y estará presente en las carreras, aunque no podrá participar en los entrenamientos de los viernes por no ser considerado un novato.
Catarineu explicó que el acuerdo benefició a todas las partes: “Flavio logró contratar a Franco, y James pudo darle la posibilidad de que pueda correr, ya que en Williams los pilotos titulares tienen contratos a largo plazo”.
Aunque no está garantizado un debut en un Gran Premio, Catarineu confía en las capacidades de Colapinto: “No sé si va a debutar en Australia, Miami o donde sea, lo que sé es que Franco demostró que puede correr, y por algo lo contrató Alpine”.
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Colapinto y un cambio de vida
La irrupción de Colapinto en la Fórmula 1 marcó un antes y un después en su vida. Desde su debut en Monza, ha enfrentado desafíos y adaptaciones propias de la élite del automovilismo. “La vida de Franco ese día cambió para siempre. Él se va adaptando a lo nuevo, aunque hay días más difíciles. Se prepara mucho para manejar estos cambios y entiende que su sueño también trae responsabilidades”, reflexionó Catarineu.
La representante recordó una conversación entre Colapinto y Lando Norris, donde discutieron sobre el impacto personal de estar en la Fórmula 1. “Franco está bien, le gusta y lo está disfrutando. En la vida, siempre hay que enfocarse en lo positivo y no mirar atrás. Esto le da la oportunidad de motivar a muchas personas”, agregó.
Con su incorporación a Alpine, Franco Colapinto no solo asegura un lugar en el competitivo mundo de la Fórmula 1, sino que también refuerza su posición como una de las grandes promesas del automovilismo argentino. Su felicidad y motivación reflejan el entusiasmo por este nuevo capítulo en su carrera: “Está súper contento. Hace pocos meses no sabíamos si íbamos a estar en la Fórmula 1, y ahora está disfrutando plenamente esta nueva etapa”, concluyó Catarineu.
JC