El sindicalismo busca retomó esta semana su pulseada con la gestión de Javier Milei con múltiples medidas de fuerza.
El Gobierno enfrenta una nueva jornada marcada por medidas de fuerza en reclamo por salarios y condiciones laborales.
El sindicalismo busca retomó esta semana su pulseada con la gestión de Javier Milei con múltiples medidas de fuerza.
La primera fue ayer, y estuvo protagonizada por los estatales de ATE. Este miércoles es la segunda medida: una huelga de casi todos los gremios del transporte. Es por eso que habrá problemas para viajar en avión, en la actividad portuaria y demás servicios.
En tanto, este jueves, el paro lo harán los gremios del transporte urbano de pasajeros, una medida convocada por la Unión Tranviarios Automotor (UTA).
Dos de las tres medidas de fuerza pautadas son impulsadas por los sectores sindicales opositores al gobierno libertario, ATE y el moyanismo, mientras que el de colectivos de la UTA obedece a una disputa salarial con las empresas del sector.
Este miércoles será el paro con mayor alcance e impacto, ya que durante todo el día no habrá servicio de trenes, subtes, camiones ni transporte aéreo y marítimo.
Sólo circularán las líneas de colectivos que controla el gremio de la UTA, que no se plegó al paro de la Mesa Nacional del Transporte por las diferencias históricas de su líder, Roberto Fernández, con los Moyano.
La medida de fuerza fue impulsada por el moyanismo, que controla una de las dos entidades que integran la Mesa Nacional del Transporte, la CATT. También la integra la UGATT, de la que forma parte la UTA y también La Fraternidad (maquinistas de trenes), que sí adhiere.
"El ajuste impulsado por el gobierno de Javier Milei, el aumento de los boletos tras la quita de subsidios, el intento de privatización de Aerolíneas Argentinas, el ataque a los jubilados y en rechazo al aumento de la pobreza", se informó en el comunicado de convocatoria al paro.
En tanto, el panorama de este miércoles se completa con una serie e protestas convocadas por organizaciones sociales. La Utep y el Polo Obrero, entre otras, llamaron a concentraciones en diversos puntos del país.
En el centro porteño y zonas del conurbano hay ollas populares. Reclaman, entre otras cuestiones, por la falta de alimentos en los comedores.
En tanto, el jueves será el turno de los colectiveros de la UTA, que harán su propia medida durante toda esa jornada debido a que no logran cerrar un acuerdo salarial.
Este lunes, el gremio de Fernández mantuvo un encuentro con las cámaras del sector pero no se pusieron de acuerdo. La UTA había solicitado un salario básico para agosto de $1.160.000, con aumentos progresivos hasta llegar a $1.322.136 en diciembre.